La rana y el agua hirviendo.

Existe una fábula, que cuenta la historia de una rana que un día, saltando y jugando, se topo con una olla de agua hirviendo, al hacer contacto con el agua  a tan alta temperatura la rana salto despavorida logrando salvar su vida de tan cruel destino.

Poco tiempo después, jugando entre salto y salto,  se topo muevamente con una olla con agua, al ver el agua se detuvo y recordando su anterior experiencia se acerco a esta con gran cautela, pero al observar que el agua no estaba caliente decidió continuar saltando a su alrededor hasta que callo en ella. Al sentir la calides del agua templada, resolvió permanecer en ella, disfrutando la sensación de relajación que le brindaba esta. Lo que no se percato la rana, era que la olla estaba sobre unas brazas  con el fin de ir calentando el agua hasta que hirviera, a medida que iba pasando el tiempo el agua subía de temperatura lentamente y la rana no se percataba de esto, porque era tan lento el proceso que no apreciaba lo que el cambio de temperatura le estaba haciendo a su cuerpo. Sin embargo, el aumento de temperatura no pasaba en vano he iba debilitando sus fuerzas, hasta el punto que cuando el agua comenzo a hervir ya no tenía fuerzas para saltar de la olla, y termino muriendo allí.

Cuantas veces como la rana, hemos salido despavoridos, cuando reconocemos un peligro eminente. Probablemente sean muchas. Ya que nuestro cerebro reptileano, reacciona rápidamente ante un peligro reconocido como eminente y nos da la orden de reaccionar acorde a lo que el considera es nuestra salvación. Sin embargo, las sutilezas con que nos abordan otras circunstancias nos llevan a que nuestro cerebro límbico lo asocie a emociones, que seducen y envuelven al reptil hasta controlarlo y no dejarlo actuar.

Cómo darnos cuenta de ello, revertir el riesgo y tomar la decisión que sea más favorable en ese momento.

Algo que he podido evidenciar, es que las personas con un buen manejo de sus emociones, por alguna razón, poseen una sana autoestima y esto pareciera que les permite reaccionar de modo efectivo ante situaciones que los pudiera poner en riesgo. Porque  se caracterizan por:

• Saber escoger la forma de reaccionar, sin dejar que las emociones tomen el control de la toma de sus decisiones. 

• Reconocer y expresar sus emociones,  de forma dosificada sin permitir engancharse en  una emoción específica hasta convertirla en un estado de ánimo, con la  que pueda hacerse, o aceptar que le hagan, daño. 

• Ser capaces de identificar el impacto que una acción puede tener si es tomada desde la emoción en que se encuentran, y trabajar por cambiarla hasta lograr un nuevo estado que les permita tomar una mejor decisión, con la que salgan mas favorecidos. 

Quizás puedas pensar que lograr esto es una fantasía. Pero yo he tenido el placer de conocer gente así, y lo mejor de todo es que al conversar con ellos sobre esta fabulosa habilidad, en su mayoría, me han hecho saber que este logro ha sido producto de desarrollar destrezas que les han permitido ser capaces de:  

• identificar las emociones que sienten en diferentes momentos. A veces el solo poder ponerle un nobre les ha permitido sentirse con mayor dominio de la misma, más aún cuando han logrado sentir su desarrollo a lo largo de su aparición. 

• Entender y poder aceptar que lo que están sintiendo es válido, porque ello es producto de una situación en particular que no necesariamente debe mantenerse en el tiempo, ya que en la vida lo único constante es el cambio y este puede ser generado. 

• Aprender que la mente no distingue entre realidad e invención, por ello el sólo dibujar una sonrisa en los labios puede generar las mismas conecciones y efectos que una sonrisa real. 

Sus experiencias me han enseñado que convertir esas destrezas en un hábito es lo que  les ha dado la capacidad de manejar emociones fuertes y salir más rápido de situaciones difíciles, de donde otros aún no han logrado salir.

No te digo que trabajar en estos sea sencillo, pero lo que si he experimentado es que los pequeños logros que he ido obteniendo me motivan a seguir adelante porque hay algo que me hace sentir que voy por buen camino.

Si hay algo más que puedas aportar sobre el tema, te invito a compartirlo ya que es una forma de juntos crecer y contribuir a que otros también lo puedan hacer.

Cambia tu atención y cambiarás tus emociones, cambia tu emoción y tu atención cambiará de lugar

                                               Frederick Dodson



No te tienes porque conformar con la vida que tienes......... 
                                                                               
                                                                                   DISEÑA TU VIDA A TU MEDIDA